Charles John Huffam Dickens
Charles Dickens
(Portsmouth, 7 de febrero de 1812-Gads Hill Place, 9 de junio de 1870)
Fue un escritor y novelista inglés, uno de los más conocidos de la literatura universal, y el más sobresaliente de la era victoriana.
Fue maestro del género narrativo, al que imprimió ciertas dosis de humor e ironía, practicando a la vez una aguda crítica social. En su obra destacan las descripciones de gente y lugares, tanto reales como imaginarios. Utilizó en ocasiones el seudónimo Boz.
Sus novelas y relatos cortos gozaron de gran popularidad durante su vida, y aún hoy se editan y adaptan para el cine habitualmente. Dickens escribió novelas por entregas, el formato que usó en aquella época fue la ficción, por la sencilla razón de que no todo el mundo poseía los recursos económicos necesarios para comprar un libro. Cada nueva entrega de sus historias era esperada con gran entusiasmo por sus lectores, nacionales e internacionales. Fue y sigue siendo admirado como un influyente literario por escritores de todo el mundo
hijo de John Dickens (1786-1851), oficinista de la Pagaduría de la Armada en el arsenal del puerto de Portsmouth, y de su esposa Elizabeth Barrow (1789-1863). Su madre era de clase media y su padre siempre arrastraba deudas, debido a su excesiva inclinación al despilfarro.
Vivió en uno de los suburbios más pobre de Londres.
Conoció a Alejandro Dumas y a un joven Julio Verne.
Los escritos de Dickens fueron sumamente populares en sus días y fueron leídos extensamente.
Charles no recibió ninguna educación hasta la edad de nueve años, hecho que posteriormente le reprocharían sus críticos, al considerar su formación en exceso autodidacta.
*Se interesó por la escena teatral londinense, apuntándose a clases de interpretación, pero el día de la realización del casting, padeció gripe y no pudo asistir, apagándose así sus sueños de ser actor teatral.
Charles pasaba el tiempo fuera de su casa, leyendo vorazmente. Mostró una particular afición por las novelas picarescas, como Las aventuras de Roderick Random y Las aventuras de Peregrine Pickle de Tobias Smollett, y Tom Jones de Henry Fielding. Éste sería su escritor favorito. También leía con fruición novelas de aventuras como Robinson Crusoe y Don Quijote de la Mancha.
Dickens tenía profundas convicciones religiosas. Escribió “La vida de nuestro Señor” un libro corto que abordaba la vida de Jesucristo con un lenguaje sencillo y que fue escrito con el propósito de inculcar la religión cristiana a sus hijos.
Su gran best seller fue David Copperfield, del cual llegó a vender hasta 100 000 ejemplares en poco tiempo. Fue también el primer escritor en utilizar la palabra detective en sus novelas.
Influido por su formación protestante, rechazó las denominaciones del catolicismo y el evangelicalismo, y trató de forma crítica la hipocresía de instituciones religiosas y filosofías, espiritualismo que él consideraba una desviación del verdadero espíritu del cristianismo.
su popularidad le permitió comprar Gad's Hill Place. Esta gran casa ubicada en Higham, Kent, tenía un especial significado para el escritor, ya que de niño había caminado por sus cercanías y había soñado con habitarla.
Su padre fue denunciado por impago de sus deudas y encarcelado en la prisión de deudores de Marshalsea. La mayor parte de la familia se trasladó a vivir con el Sr. Dickens a la cárcel. Charles fue acogido en una casa de Little College Street, regentada por la Señora Roylance y acudía los domingos a visitar a su padre en la prisión.
A los doce años, comenzó a trabajar en jornadas diarias de diez horas en Warren's boot-blacking factory. Durante este periodo su vida transcurrió pegando etiquetas en los botes de shoes polish. Ganaba seis chelines semanales. Con este dinero, pagaba su hospedaje y ayudaba a la familia.
su situación económica no mejoró hasta pasado un tiempo, cuando al morir su abuela materna, su padre recibió una herencia de 250 libras. Aun así su madre no retiró a Charles de la fabrica, es mas lo obligo a permanecer en ella. Estas vivencias marcarían su vida como escritor: dedicaría gran parte de su obra a denunciar las condiciones deplorables bajo las cuales sobrevivían las clases proletarias.
El 2 de abril de 1836 contrajo matrimonio con Catherine Thompson Hogarth y estableció su residencia en Bloomsbury. Años después se separo de ella. No obstante, continuó manteniendo a ella y a la casa por los siguientes 20 años, hasta el día que ella falleció. Aunque inicialmente vivían felices juntos, Catherine no parecía compartir en lo más mínimo la desmedida energía que Dickens tenía.
fue rechazado por la sociedad de Estados Unidos debido a las conferencias que impartía y a la novela “Notas de América”, contraria a la esclavitud y que Dickens había experimentado personalmente en su infancia. A pesar de ello se reconcilió con el público después de la publicación de “Canción de Navidad”.
Obligado por nuevas necesidades económicas, extendió su actividad a otros campos: organizó representaciones teatrales, fundó el Daily News, hizo de actor y comenzó a dar conferencias, como las que daba sobre los derechos de autor, defensa de las prostitutas y condena de la pena de muerte, muy en boga en Londres como divertimento del pueblo.
Después de separase de su esposa se refugió en casa de su amigo Wilkie Collins (el creador del misterio). Llegaron a escribir relatos juntos y se recomendaban ideas para sus respectivas novelas.
Dickens sufrió un accidente, el famoso choque ferroviario de Staplehurst, en el cual los siete primeros vagones del tren cayeron de un puente que estaba siendo reparado. El único vagón de primera clase que no cayó fue aquel donde se encontraba Dickens. El novelista pasó mucho tiempo atendiendo a los heridos y moribundos antes de que los rescatadores llegasen. Antes de partir se acordó del inconcluso manuscrito de Nuestro amigo mutuo, y regresó al vagón únicamente a recuperarlo. Típico de Dickens, él luego usaría esta terrible experiencia para escribir su corta historia de fantasmas
Ellen Ternan, una actriz, había sido la compañera de Dickens desde que éste finalizó su matrimonio. Ella continuó siendo su compañera, más bien su señora, hasta el día de su muerte.
fue recibido por la reina Victoria I, la cual era gran lectora de sus obras.
En 1869 Dickens aceptó presidir el Birmingham and Midland Institute, convirtiéndose así en su decimosexto presidente.
Cinco años después del accidente ferroviario, el 9 de junio de 1870, murió al día siguiente de sufrir una apoplejía, sin haber recuperado la consciencia.
Contra su deseo de ser enterrado en la catedral de Rochester (la cercana a su domicilio), «de forma barata, sin ostentaciones y estrictamente privada», lo fue en la llamada «Esquina de los Poetas» de la Abadía de Westminster, si bien se procuró respetar su deseo de privacidad.
Dickens estipuló que no se erigiera ningún monumento en su honor a su muerte; su única estatua de tamaño natural data de 1981, fue realizada por Francis Edwin Elwell, y se encuentra localizada en Clark Park, Filadelfia, en los Estados Unidos.
Su gran sueño fue el de ser libre y lo consiguió siendo escritor.
Su novela Oliver Twist ha sido llevada en numerosas ocasiones a la gran pantalla.
El estilo de Dickens es florido y poético, con un fuerte toque cómico. Sus sátiras sobre el esnobismo de la aristocracia británica son a menudo populares. Comparaciones de huérfanos con accionistas o comensales con muebles son algunas de sus más aclamadas ironías.
A Dickens lo han llamado un autor cuyos personajes son de los más memorables y creativos en la literatura inglesa —si no exclusivamente por sus peculiaridades insólitas, con certeza por sus nombres—. Personajes, como Ebenezer Scrooge, Fagin, Mrs. Gamp, David Copperfield, Charles Darnay, Oliver Twist, Micawber, Pecksniff, Miss Havisham, Wackford Squeers y muchos otros, son tan bien conocidos, que se puede hasta creer que tienen una vida fuera de sus novelas y que sus historias continuarían con otros autores.
A Dickens le encantaba el estilo del siglo XVIII, el romance gótico, incluso lo llegó a tomar a juego —Northanger Abbey, de Jane Austen, fue una muy conocida parodia— y mientras algunos son grotescos, sus excentricidades no suelen eclipsar sus historias.
La mayoría de las obras maestras de Dickens fueron escritas como entregas mensuales o semanales en periódicos. siendo posteriormente reimpresas en libros. Estas entregas hacían las historias más baratas y accesibles.
Las novelas de Dickens eran, entre otras cosas, trabajos de crítica social. Él era un fiero crítico de la pobreza y de la estratificación social de la sociedad victoriana. A través de sus trabajos, Dickens mantenía una empatía por el hombre común y un escepticismo por la familia burguesa.
A menudo Dickens usaba idealizados personajes y escenas de alto toque sentimental contrastando con sus caricaturas y las terribles verdades sociales que revelaba.
Todos los autores incorporan elementos biográficos en sus ficciones, pero con Dickens esto es muy notable, incluso cuando temía ocultar lo que él consideraba su vergonzoso, humilde pasado. Dickens pudo haber dibujado sus experiencia infantiles, pero él estaba también avergonzado de ellas y no revelaría que sus propias narraciones venían de la mugre. Muy pocos conocían los detalles de su vida hasta después de seis años de muerto.
Estudiosos y escritores como George Gissing y G. K. Chesterton defendieron y aclamaron su dominio de la lengua inglesa como inigualable, sus personajes como inolvidables, y en gran medida su profunda sensibilidad social. No obstante, también recibió críticas de lectores importantes —George Henry Lewes, Henry James y Virginia Woolf, entre ellos— los cuales achacaron ciertos defectos a sus obras, como el sentimentalismo efusivo, acontecimientos irreales y personajes grotescos.
Mantuvo una gran calidad en todos sus escritos y aunque raramente se apartaba de su típico método dickensoniano de siempre intentar escribir una gran «historia» en una manera convencional, experimentó con numerosos temas, caracterizaciones y géneros. Algunos de estos experimentos fueron más exitosos que otros y la apreciación pública de sus obras variaron a través del tiempo.
Cuento de Navidad fue escrito por Dickens en un intento de prevenir un desastre financiero como resultado de las bajas ventas de Martin Chuzzlewit. Años después, Dickens compartiría que siempre estuvo «profundamente afectado» al escribir Cuento de Navidad y la novela rejuveneció su carrera como un renombrado autor.
En un tiempo en el que Gran Bretaña era el mayor poder político y económico del mundo, Dickens destacó la vida de los pobres olvidados en el corazón del imperio. A través de su periodismo hizo campaña sobre cuestiones específicas —como la higiene y las workhouses— pero su ficción era probablemente lo más poderoso para cambiar la opinión pública sobre las desigualdades de clase. Seguidamente describió la explotación y represión de los pobres y condenó a las instituciones públicas oficiales que permitían la existencia de tales abusos.
Sus escritos inspiraron a otros, en particular, a periodistas y figuras políticas, para incluir en sus agendas estos problemas de opresión de clase.
La popularidad excepcional de sus novelas, incluso aquellas con temas de oposición social subrayaban no sólo su casi natural habilidad para crear apremiantes historias e inolvidables personajes, sino que también aseguraban que los temas públicos sociales y de justicia que normalmente eran ignorados, fuesen enfrentados.
Tuvo diez hijos: Charles Culliford Boz Dickens, Mary Dickens, Kate Macready Dickens, Walter Landor Dickens, Francis Jeffrey Dickens, Alfred D'Orsay Tennyson Dickens, Sydney Smith Haldimand Dickens, Henry Fielding Dickens, Dora Annie Dickens y Edward Bulwer Lytton Dickens.
Trabajo como pasante en el bufete de los procuradores Ellis & Blackmore y después de un tiempo como taquígrafo judicial. Colaboro como reportero en el Doctor's Commons y posteriormente ingresó en calidad de cronista parlamentario en el True Sun. Lo contrató el Morning Chronicle como periodista político, para informar sobre debates parlamentarios, y viajar a través del país a cubrir las campañas electorales. Trabajo de editor del Bentley's Miscellany. Fue asiduo contribuyente de Household Words y All the Year Round.
Dickens se mantiene hoy como un brillante innovador y algunas veces defectuoso novelista cuyas historias y personajes se han convertido no sólo en arquetipos literarios sino también en parte de la imaginación pública.
Novelas
-Papeles póstumos del Club Pickwick
-Oliver Twist
-Nicholas Nickleby
-La tienda de antigüedades
-Barnaby Rudge
-Martin Chuzzlewit
-Dombey e hijo
-David Copperfield
-Casa desolada
-Tiempos difíciles
-La pequeña Dorrit
-Grandes esperanzas
-Nuestro común amigo
-El misterio de Edwin Drood ( inconclusa)
Relatos
-Cuento de Navidad
-Las campanas
-El grillo del hogar
-La batalla de la vida
-El hechizado
-Hombres intrépidos
-Una casa para alquilar
-El guardavía
Dato curioso
CHARLES a pesar de ser un gran escritor, fue un hombre que nunca comprendió a su mujer la cual se dedico a cuidar de su casa y sus hijos, aunque ella quería brindarle mas que eso al mundo; no pudo. porque sus diez hijos necesitaban de su madre. fue una mujer generosa y amorosa con sus hijos.
no vi nada justo que sus hijos a la hora de los trámites de divorcio esto tendrían que quedarse con su padre. ellos deberían de elegir con quien vivir... Aunque era otra época...
desde su separación vivió sola y murió de cáncer.
su separación se debió a que ella no dedicaba tiempo para Charles y se había vuelto una mujer que no cuidaba de si misma "estaba gorda" y según Charles siempre estaba paranoica y celosa.
Charles a pesar de ser un hombre inteligente y un excelente escritor, no fue un buen esposo, al principio si lo fue cuando el matrimonio era prospero, cuando su esposa no le había dado mucho hijos, cuando su esposa lo acompañaba a sus viajes. luego todo se derrumbo. Charles culpo a Catherine de ser demasiado fértil, inclusive le cerro la puerta a su alcoba.
el en vez de afrontar que ya no amaba a su esposa, busco la forma de hacerla ver como la mala de la película.. como si la culpa fuese solo de ella..
Catherine siempre apoyo a Charles en toda su travesia, lastima que el no valorara el amor que ella le había ofrecido. Catherine inclusive le tenia miedo a Charles ya que el no le permitía expresar su opiniones.
Charles a pesar de ser un hombre inteligente y un excelente escritor, no fue un buen esposo, al principio si lo fue cuando el matrimonio era prospero, cuando su esposa no le había dado mucho hijos, cuando su esposa lo acompañaba a sus viajes. luego todo se derrumbo. Charles culpo a Catherine de ser demasiado fértil, inclusive le cerro la puerta a su alcoba.
el en vez de afrontar que ya no amaba a su esposa, busco la forma de hacerla ver como la mala de la película.. como si la culpa fuese solo de ella..
Catherine siempre apoyo a Charles en toda su travesia, lastima que el no valorara el amor que ella le había ofrecido. Catherine inclusive le tenia miedo a Charles ya que el no le permitía expresar su opiniones.
Y ELLA SIEMPRE TUVO LA RAZÓN.... CHARLES LE PONÍA LOS CUERNOS.
Aunque ella menciona en una carta que el al principio la AMO.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario